Cáritas sondea las necesidades de las personas mayores
En la sexta semana de confinamiento, del 19 al 25 de abril, Cáritas Diocesana de Valladolid ha realizado un sondeo entre los participantes en los talleres de envejecimiento saludable para identificar sus necesidades y reorientar la acción.
Durante esta semana, las dos responsables técnicas del Programa de Mayores han mantenido extensas conversaciones telefónicas con ciento setenta y dos personas para detectar sus necesidades. Los datos finales aportan una interesante información para el proceso de adaptación del programa a las nuevas circunstancias provocadas por el COVID-19.
Una primera constatación es que una de cada tres personas mayores se encuentran en estos momentos físicamente solas en el hogar. Así mismo se ha detectado en un 15 % que la situación generada por la enfermedad está causando agobios, desesperanza, … No obstante, en estos últimos casos no se considera todavía precisa una intervención más especializada, aunque no se descarta que según evolucione la situación pueda ser necesario el apoyo del equipo psicológico de Cáritas Diocesana de Valladolid. Con todas estas personas se realizará un plan de llamadas más intenso.
También se trataba con este sondeo de determinar si presentaban las personas mayores algún otro tipo de necesidad social. Afortunadamente, tan solo se han detectado dos situaciones de relacionadas con una necesidad de intensificar los cuidados para lo cual se ha puesto a disposición de las familias la trabajadora social del programa con el objetivo de si lo estiman oportuno apoyar en las gestiones que sean precisas.
Otro aspecto que este diagnóstico pretendía identificar es la capacidad de conectividad digital de los mayores. Los resultados ponen de manifiesto que el 45 % no disponen de ningún medio para ello (ni móvil ni ordenador). Y del 50 % que utiliza el móvil para otras operaciones que no sean sólo las llamadas, la mitad dispone de aplicación de mensajería, lo que representa un total de 1 de cada cuatro personas mayores.
Consultados también si tienen interés en que por parte de Cáritas Diocesana de Valladolid se les ofrezca alguna otra propuesta para continuar con el objetivo del programa de mayores de un envejecimiento saludable, a la mitad le parece bien. Incluso uno de cada diez estaría dispuesto a que, con las debidas medidas de seguridad y prevención, una persona voluntaria pudiera acercarse a su domicilio.
Teniendo presentes todos estos datos, el equipo animador del programa de mayores, en su reunión del lunes 27 de abril, acordó facilitar a las personas mayores:
- Una infografía recordando varias indicaciones que las personas mayores tienen que poner en práctica en este tiempo de confinamiento y/o restricción de movilidad, para que no resulte perjudicada su salud.
- Materiales y orientaciones para continuar con el entrenamiento y la estimulación cognitiva.
- Una postal con un mensaje de ánimo ilustrada con dibujos infantiles de la iniciativa “Un dibujo para alegrar el mundo” del «Programa de infancia, adolescencia y juventud» de Cáritas Diocesana de Valladolid. Si siempre es importante, la vinculación entre niños y mayores en este momento resulta fundamental.
Este material, elaborado por las dos técnicas que venían animando los talleres de mayores, y por tanto, conocedoras de sus necesidades, se hará llegar a los domicilios de las personas que han mostrado interés a través de varios medios:
- Vía telemática, bien directamente a las personas mayores, bien a otro familiar que dispone de los recursos para ello.
- Depósito en el buzón de su domicilio, para lo que se contará con la implicación de las Cáritas Parroquiales.
- Entrega en mano por parte de una persona voluntaria.
En el último caso, el objetivo no es solo que a las personas mayores les llegue el material, sino además humanizar, aunque sea un poquito, la situación de aislamiento social. Se trataría de que la necesaria distancia física no se convierta en distanciamiento social. Un factor importante para un envejecimiento saludable es la relación social, de persona a persona. En este caso, aunque sea con distancia, se va a ofrecer a los mayores la oportunidad de mirar a los ojos a otra persona e intercambiar unas palabras.
Con todo esto, Cáritas Diocesana de Valladolid da continuidad a su proyecto “Envejecemos en común” adaptándolo a la situación actual pero manteniendo el objetivo: Evitar el aislamiento y la exclusión social de personas mayores que se sienten solas mediante la generación de redes sociales, la participación y el voluntariado.