Cáritas Diocesana de Valladolid se encuentra en un proceso de reflexión para que todo su quehacer sea más fiel a su identidad. Para ello ha tomado como referencia la Instrucción Pastoral de la Conferencia Episcopal Española Iglesia, servidora de los pobres.
En este documento se propone una actitud de continua renovación y conversión que cambie nuestra acción caritativo y social: «En la medida que nos adhiramos más a Cristo, en la medida en que nos conformemos más a Él, de manera que veamos con sus ojos, escuchemos con sus oídos y sintamos con su corazón, nuestra caridad será más activa y más eficaz» (34)
Para ello es imprescindible añadir a la atención a las necesidades materiales más inmediatas (alimentos, ropa, medicinas, consumos de la vivienda, …) el acompañamiento a las personas:
El acompañamiento a las personas es básico en nuestra acción caritativa. Es necesario «estar con» los pobres -hacer el camino con ellos- y no limitarnos a «dar a» los pobres los recursos (alimento, ropa, etc.) el que acompaña se acerca al otro, toca su sufrimiento, comparte el dolor.
Iglesia, servidora de los pobres 47
En la acción de Cáritas en el territorio a través de las Cáritas Parroquiales apoyadas por los técnicos de los servicios diocesanos se van dando pasos en esta dirección del acompañamiento a las personas que sufren hoy las diferentes realidades de empobrecimiento.
Un caso práctico son algunas de las parroquias del Arciprestazgo Este de la ciudad (San Isidro, San Ignacio, María Auxiliadora y la unidad pastoral Nª Sª del Pilar-Nª Sª de Belén). A la atención que se realiza en cada una de las parroquias se han ido sumando acciones de acompañamiento a la infancia y juventud, personas mayores y, en este curso 18-19, a mujeres.
En los locales parroquiales de Nª Sª del Pilar se desarrolla el proyecto de apoyo escolar «Águila». A partir de este curso la atención a la infancia y adolescencia se ve reforzada con la puesta en marcha en la zona de un proyecto de Educación de Calle con la pretensión de abrir opciones a aquellos muchachos que carecen de referencias institucionales y escasas posibilidades de futuro.
Otro sector que se viene atendiendo desde hace ya bastante tiempo es el de las personas mayores solas y/o con muchas dificultades de movilidad que las impide unos vínculos sociales estables. En Nª Sª de Belén, Nª Sª del Pilar, San Ignacio y San Isidro se han habilitado unos espacios de encuentro semanal de estas personas mayores que aprovechan para realizar actividades que las permitan un envejecimiento saludable con ejercicios de entrenamiento de la memoria, psicomotricidad, charlas informativas, …
La otra novedad de este curso ha sido el inicio del proyecto «Encuentrate» con mujeres de los barrios de Belén, Pilarica, Pajarillos y las Flores con el objetivo de que tengan un espacio de encuentro con otras mujeres que responda a sus intereses y les permita combatir la soledad con la que normalmente tienen que afrontar sus vidas. En estos momentos organizan sus tertulias en torno a la fabricación de un bolso y tomando un café juntas.
Todas ellas pequeñas acciones, en sí mismas muy sencillas, pero con una clara intencionalidad: acompañar la vida de las personas que están sufriendo la pobreza y/o la exclusión social y despertar el interés por vivir con dignidad, la dignidad de los hijos y las hijas de un Dios Padre-Madre que ama especialmente a los pequeños.