Toda la vida pagando un piso y, cuando uno alcanza la senectud, se ve imposibilitado en numerosas ocasiones de llevar una vida digna. Para evitar este tipo de situaciones, las entidades bancarias idearon la "hipoteca inversa", que consiste en que ellas 'heredan' el piso en propiedad del anciano a cambio de una remuneración mensual. Esta fórmula se ha granjeado el visto bueno del 44% de los españoles de entre 50 y 64, que estarían dispuestos a contratarla en caso de tener graves dificultades económicas para afrontar su vejez.